Texto Dadaísta

Que tu sombra me persigue todo el día y me pregunto en que estás...
No alcanzo a cruzar la calle cuando estoy pensando nuevamente en ti. Y cuando me doy cuenta ya es demasiado tarde, he pensado todo el día en lo mismo, en qué haría si te viera otra vez.
Pues nada más que todos los días caigo en la fantasía de viajar en el tiempo y morir aquel día en vez de frenar bruscamente el auto para no destrozar al ebrio que se me cruzó.
Tendencias suicidas son fantasías increibles, pero no es la solución. Debo dejar de preocuparme y ocuparme, para que así, en el momento que me veas, sea un hombre que ha decidido vivir.
Por qué me preocupa tanto lo que piense de mi...
Serotonina en diez, nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro, tres, dos, uno... ¡depresión, depresión!
Llamemosle como queramos hijos mios... pero el sentimiento es el mismo, sea pena o un cuadro depresivo, para que suene más grave. Siempre será una baja en las ganas de vivir, pero no al punto de dejar de vivir realmente. Gracias a Freud.
Y ahora qué... me dije mientras cruzaba por última vez ese puente. Y ahora quién. Para quién.
Necesito gritarle al mundo que mi vida es para mi una mierda, que no vale ni la pena... ni nada.
Tambien necesito gritarle que me siento con muchas ganas de vivir, que soy un hombre feliz.
Necesito decirte cuanto haces falta en mi vida. Cuanto he dejado de dormir por miedo a soñar contigo.
Necesito susurrarle al mundo, que si logro salir de bachillerato y superar 5to medio, tendrá un psicologo en curso muy apasionado, laico, nuevo.
El efecto embudo empieza a hacer efecto, las ideas salen más rapido cuando van quedando pocas.
Por favor lectores, no interpreten esto como una carta suicida. Veanlo como lo que realmente es: un texto "Dada", manifestaciones del inconsciente. Gracias Totales.

Hagamos un trato

Compañera
usted sabe
que puede contar
conmigo
no hasta dos
ni hasta diez
sino contar
conmigo.

Si alguna vez
advierte
que la miro a los ojos
y una veta de amor
reconoce en los míos
no alerte sus fusiles
ni piense qué delirio
a pesar de la veta
o talvez porque existe
usted puede contar
conmigo.

Si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo
no piense qué flojera
igual puede contar
conmigo.

Pero hagamos un trato
yo quisiera contar
con usted
es tan lindo
saber que usted existe
uno se siente vivo
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos
aunque sea hasta cinco
no para que acuda
presurosa en mi auxilio
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe
que puede
contar conmigo.

Mario Benedetti.