A veces la fuerza más poderosa sale de la más pequeña de las estrellas.
Y aunque ya no estoy tan pequeño de tantas calorías atascadas, no me quedaré atrás. Sólo pedía a los santos y santas de Dios la ultima oportunidad de abrazar a quien alguna vez fue mi gran admirador, pero si uno no gasta su propia energía en eso, los santos no podrán hacer nada, nisiquiera existirían de no ser por la mente humana y pretendemos que hagan algo por nosotros tan solo pensandolo.
Faltó un valde de agua fría para darme cuenta que estaba pidiendole a las paredes de concreto que sostuvieran una fuerza que a veces ni la misma naturaleza puede contener... Me sentí estupido cuando me di cuenta de lo que sucedía, pero bueno, ahora esa fuerza es mía y sé que existe, ahora esta avalancha de grasa y lagrimas pasa por un costado mio y cae en un lugar que no quiero ni mirar. Me prometo que seré alguien admirado, alguien que sea gusto tener al lado, alguien.
Cuando uno sabe lo que quiere, nada te puede detener, por algo he resistido un año de vagabundeo, otro de bachillerato, y otro de paro. Sé que a pesar de lo que tenga que hacer, lo que quiero hacer lo haré, y lo que quiera hacer parte de mi vida, será.
Solo tengo que ordenar la casa para que podamos abrir la puerta, y podamos sentarnos a conversar.
De pronto te ves sobrepasado por eso que creías una brisa. Sabes que venía, pero no quisiste prestarle atención y lo subestimaste como lo haces con la mayoría de las cosas.
Esa brisa resultó ser una gran ola, abrumadora y agresiva. Una ola que traía consigo un mar de angustias y prejuicios, de incomunicación, de malos entendidos, de angustia, de angustia...
Seguir como que nada pasa es algo insensato, insano, in... y mientras más te demores en admitir que necesitas ayuda, de tus amigos, de tu gente, será más dificil rescatarte de ti mismo.
Hay días en que no me soporto, en que siento que todos deberían dejarme tranquilo y no ponerme atención, y que al mismo tiempo nadie debería hacer otra cosa que ponerme atención.

Hace unos días me encontré con alguien que estaba en los ficheros hace mucho tiempo, fue muy raro, había cambiado y yo tambien... conversamos mucho rato, y quedamos de vernos más seguido. Al día siguiente se fue a Israel, y se quedó ahi hasta que le perdí el rastro.
Que ganas de poder cambiar lo que no te gusta de ti mismo como quien se cambia de corbata, de poder confiar en uno mismo como quien se deja proteger por el cinturón de una montaña rusa.
Mírame, estoy diciendo bobadas por miedo a no tener nada que decir y dejar de ser interesante para ti.

Abrázame

Hay momentos en que salen a la luz unos pensamientos que despues se me olvidan como por arte de magia. Siempre estan en la misma situación, cada vez que los pienso.
Me gustaría tener esa visión del mundo que algunos tienen, una dimensión de su persona que odio y admiro en distintos momentos. Un concepto de espacio personal que va más allá de lo físico, una idea de lo propio que es nada más que eso, lo propio.
Si tengo ganas de hacer o no hacer una cosa, algo me detiene a hacerlo notar o hacerlo valer. Esa sensación de que comparto en ese instante un espacio temporal y situacional con otras personas, me detiene a dejarme llevar por lo que quiero y siento. Pero no necesariamente pasa al revés, es más, probablemente las otras personas hacen lo que tienen ganas y hacen de los demas participantes voluntarios de sus acciones. Me explico, participantes porque comparten la acción del sujeto y voluntarios porque tienen la opción de no hacerlo y en vez de eso hacer algo que ellos quieran o les nazca.
Siempre me ha sido fácil relacionarme con gente egocentrica, por mi falta de acción propia en el día a día. Tomo decisiones en base a lo que el otro quiera sin tener muchas veces en cuenta mis propias ganas de hacer algo. La persona egocentrica no se preocupará de que yo no tome decisiones por mi, si el centro es él mismo.
¿Qué pasa cuando me separo de esas personas? Bueno pues, encuentro mis voluntades y son abrumadoras, comienzo a hacer lo que quiero hacer con ciertas cojeras por lo amateur, pero apenas vuelva esa persona sé que dejaré mis voluntades para que no se moleste por mis mañas.