Corrían las horas a toda velocidad, también los kilómetros...
Tú dormías sintiendo el ritmo del motor mezclado con intentos de canciones provenientes de la radio.
La mejor palabra para resumir el camino sería "monotono". Música de los ochenta, palanca en quinta sin intención de moverse, dormía también el copiloto, y yo aguantaba las ganas de parar a un baño...
El auto se ha portado bastante bien hasta el momento... espero que siga así.
El litoral tenía una reservación para nosotros desde hace unas semanas, y nos esperaba dichoso con nubes en el cielo y algo de lluvia para hacer un poco más cálida la estadía.
El espejo retrovisor muestra la imagen de una bella muchacha leyendo un libro de Mario Simonetti, de portada blanca... la chica está sumida en la lectura, tanto así, que no se percata de que ya ha terminado el libro.
Un gran camión viene a toda velocidad hacia mi.
120 kms/hr. indica el velocímetro y no pretende bajar...
Espero que los días no pasen tan rápido como llegamos, espero pasar hermosos días contigo...
También quiero pasarlos con ella... Dios sabrá lo que nos viene...
Por ahora, solo sé que el pijama abriga mas que la polera manga corta del amigo de mi hermano... y que Family Guy alumbra la pieza con su humor gráfico, no estoy seguro de que me enamore el humor gráfico... tampoco el periodismo.
Moi moi!
GAK.
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